Para recorrer las calles de las ciudades y Estados de México, además de saber conducir, debes conocer tus derechos y obligaciones, es decir, el Reglamento de Tránsito.
Si bien un reglamento suele asociarse con un documento que “quita libertades”, es todo lo contrario: el Reglamento de Tránsito es el que te permite transitar libremente, porque es lo que te protege para hacerlo de forma segura.
Hablar de Reglamento de Tránsito es hablar de prevención, de medidas para que conductores, acompañantes y peatones tengan protegida su vida e integridad física al desplazarse por nuestro país.
Cuando revisamos los datos que entrega la Organización Mundial de la Salud (OMS), podemos darnos cuenta de la verdadera relevancia que tiene los Reglamentos de Tránsito, ya que cerca de 1.3 millones de personas mueren al año en accidentes viales y entre 10 y 50 millones quedan con traumatismos causantes de discapacidad.
En México, lamentablemente, nos destacamos en la materia. Según datos del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), los mexicanos ocupamos el séptimo lugar a nivel mundial y tercero en Latinoamérica en muertes por accidentes de tránsito.
Cada día, mueren hasta 22 jóvenes entre 15 y 29 años por este motivo en México, dando un resultado de 24 mil por año, siendo la mayor causa de muerte en jóvenes.
Entonces, ¿es importante contar con un Reglamento de Tránsito y respetarlo? SÍ, ES MUY IMPORTANTE.
Tomar en cuenta las mediadas del Reglamento de Tránsito es primordial para mantener a salvo a las personas, por eso, no respetarlas, conllevan consecuencias que todos los niveles.
Para esto cada Reglamento tiene diferentes maneras de sancionarlas: