Los autos se componen de varias partes y piezas, algunas de ellas grandes y otras más pequeñas, todo depende de cuál parte analicemos.
Si miramos un motor, por ejemplo, podemos hablar del bloque, el cárter, el radiador, la bomba de agua, los pistones, las bielas, el cigüeñal, la culata, válvulas y varias otras cosas más, pero si miramos el carro en su conjunto podemos hablar de aspectos más generales.
En este sentido, está el motor en sí, la caja de cambios, las ruedas, los diferenciales, ejes, el chasis, los parachoques y la carrocería, y es en este último punto donde nos detendremos.
Es la carrocería la que define el segmento al cual pertenece el carro, aunque el chasis también entra en parte de las categorías de un auto que podemos ver por las calles de México.
La carrocería es, en palabras simples, la parte que le da el color, la forma y la estética al vehículo. La carrocería, a su vez, se compone del capot o cofre, los guardabarros, las puertas y el techo del automóvil.
Como te comentamos, existen varios tipos y estructuras de carrocerías, los que a la larga definen el segmento del mismo.
Eso sí, el chasis también determina ciertas diferencias, puesto que los SUV más antiguos, y también los más grandes, al igual que las camionetas, o pick-up, tienen un chasis de dos partes, como el de los camiones, mientras que los vehículos en general tienen un chasis simple.
Al respecto, te contaremos las principales diferencias que existen entre cada carrocería y qué define a cada una.
El sedán es el más típico de los vehículos, el familiar, utilitario y cotidiano por excelencia. Su categoría es tan clásica que en su momento se habló que los Vochos eran sedanes cuando realmente son hatchbacks, tipo de carrocería que ya te definiremos.
El sedán es aquel auto, como el Nissan Versa o el Volkswagen Virtus, que tiene normalmente cuatro puertas para las personas, más la quinta del portamaletas. Históricamente, se han utilizado como taxi y son herederos de muchos de los clásicos Muscle Cars americanos.
Junto con los stationwagon, que a la postre se transformaron en crossovers, son los autos familiares por excelencia, aunque el auge y versatilidad de los SUV, junto con el crecimiento de los hatchbacks le han ido quitando terreno a este clásico tipo de carrocería.
En cuanto a forma y estructura, el mejor ejemplo es un Vocho, aunque como dijimos, en muchos catálogos aparece como que el Vocho es un sedán, aunque no lo es, puesto que en su estructura ya carece de las cuatro puertas para personas.
Los hatchbaks nacieron como una opción juvenil de coches, más pequeños y en muchos casos con motorizaciones menores, donde dominaron los citycars. Incluso, al comienzo la gran mayoría tenía dos puertas solamente. Sin embargo, el desarrollo de la industria hizo que crecieran en tamaño, número de puertas, performance y otras cuestiones.
Hoy en día hay hatchback de gran tamaño como el Hyundai HB20, el Chevrolet Aveo o el Kia Rio, por ejemplo. Si miramos en retrospectiva, este tipo de hatchbacks son más grandes que los clásicos, encabezados por el Suzuki Swift, el Volkswagen Gol o el Toyota Yaris Sport.
En cilindrada, caballos y hasta en su capacidad de portamaletas hoy son similares a los sedanes, solo que con una apariencia diferente y esa línea trasera más redondeada, la que cae poco después de terminar las plazas de ocupantes traseras.
En palabras simples, el coupé es un vehículo sedán de dos puertas, que puede tener plazas traseras, pero de tamaño reducido, dado que el techo tiende a caer, apenas acaban las plazas delanteras.
El Toyota Supra, el Honda Civic Coupé o el Mazda MX5, son ejemplos de este tipo de carrocerías, que a veces tienden llamar Roadster u otros nombres, pero a la larga siguen siendo vehículos deportivos, de carrocería con aspecto sedán, de dos puertas y más cortos.
Aunque nunca es bueno tener prejuicios, normalmente un coupé algo de deportividad tiene, suelen ser más juveniles, quizás por sus líneas curvas que estiraron un hatchback o achataron un sedán.
En deportividad misma podrían tener tracción trasera, una cilindrada mayor de lo esperado, turbo, quizás, caja manual con la palanca más corta y una hoy, menos novedosa sexta marcha y butacas de competición, entre otras características.
Los convertibles, en palabras simples, son autos sin techo o con techo corredizo. Normalmente, son vehículos estilo coupé, pero con una excelente visión hacia el cielo y una gran sensación de sentir el pelo con el viento.
Una de las versiones del Mazda MX5 es uno de los convertibles más alcanzables para el bolsillo de los mexicanos, dado que roza por debajo el medio millón de pesos.
Los demás convertibles del mercado mexicano tienden a ser marcas más lujosas y caras, como BMW, Mercedes Benz, Porsche u otros aún más bombásticos. El BMW M40i, el Mercedes Benz AMG SL o el Porsche 911 son ejemplos de este tipo de carrocería.
Entre tanto tipo de carrocería disponible, sí o sí iban a aparecer hibridaciones naturales y la más insigne de ellas, que además consiguió instalarse, es el crossover, una fusión entre los SUV, hatchbacks y los antiguos stationwagons.
Volviendo a las palabras simples, un crossover es un hatchback, quizás más largo, más alto, mejor definido como un SUV compacto. El Subarú Crosstrek, el Subarú Outback o el Nissan Kicks pueden ser ejemplo de ello.
Al fusionar tantas carrocerías, se han transformado en un éxito rotundo en el mercado, siendo el preferido de varios tipos de clientes de las marcas. Esto ocurre porque juntan la apariencia juvenil de un hatchback, el espacio y altura de un SUV, con la cilindrada de un sedán en un solo vehículo.
Los SUV siempre existieron, encabezados por la Chevrolet Blazer o la Ford Bronco, son tipos de vehículos que siempre estuvieron en el radar del mercado mexicano y mundial.
Hoy hay modelos vigentes e insignes de este segmento, tales ejemplos son: la propia Chevrolet Blazer, pero también la Chevrolet Tahoe y Chevrolet Suburban. También destacan la Ford Explorer o la Nissan Pathfinder.
La gran diferencia está en que, en sus orígenes, los SUV eran vehículos casi netamente 4x4, los que ensamblaban el tren delantero a la transmisión para tener tracción a las cuatro ruedas. Todos tenían tracción trasera y un chasis de dos piezas como las camionetas o los camiones.
Generalmente, tenían cilindradas que sobrepasaban los 2.5 litros, habiendo muchos de 6 cilindros que superaban los 3.0 litros y hasta motores V8, tremendamente potentes, de gran torque y mucho gasto de combustible.
Sin embargo, hoy los SUV se han urbanizado bastante, dejando entrar al segmento modelos mucho menos offroad, con el tamaño familiar característico de un SUV, pero con tracción delantera, chasis simple y control de tracción en lugar de la 4H o 4L característica de 4x4 de antaño.
Los pick-up no pueden pasar de moda. Su tolva trasera para cargar cerca de una tonelada de lo que sea las han ayudado a trascender en el tiempo. Tal característica ha hecho que sean un incombustible vehículo para el trabajo, puesto que no existe otra carrocería en el mercado capaz de competirles en estructura.
Muchas de ellas mantienen el ADN del tipo de chasis y el 4x4 en su transmisión, aunque han llegado al mercado algunas con tracción delantera. Sin embargo, la Toyota Hilux, la Chevrolet S10, la Chevrolet Silverado, la Ford F-150 y la Dodge RAM son algunos ejemplos de este tipo de vehículo.
La mayoría de ellas tiene cuatro puertas, también existen las camionetas con cabina simple y las versiones chasis, aunque cada vez menos comunes. Eso sí, si algo ha cambiado, es que han ido incorporando algunos elementos más urbanos en pos del confort, puesto que su origen laboral muchas veces las hizo carecer de este tipo de lujos.
Hoy muchas camionetas se han vuelto más urbanas y versátiles, siendo útiles en el trabajo, pero también para un uso más familiar, la S10 y la F-150 son fiel muestra de ello.
Si vas a comprar un carro usado, hay que verificar varias cosas; donde prima la estructura del carro, su motor y por supuesto su documentación e historial legal.
En el primer caso, es muy importante checar la estructura de cualquier vehículo antes de comprarlo y entre tales revisiones destaca la carrocería. ¿Cómo puedo saber si la carrocería de un carro está en buen estado?